Sobre un chasis Mercedes Actros 3341 con tracción integral y tres ejes se construye un monstruo blindado de 31 toneladas de peso, con una cabina lo suficientemente grande para cinco personas. El carrozado corre a cargo de un especialista austriaco, Rosenbauer. Todo el vehículo y tren de rodaje está recubierto de paneles reforzados, con la cabina protegida por cristales especialmente fuertes, en combinación con materiales compuestos. El aspecto general del vehículo es futurista y amenazante.
Una de las piezas clave son sus depósitos de agua de hasta 10.000 litros, de ahí su nombre. Puede cargarse al mismo tiempo de bocas de incendio y tomas convencionales de agua. Para propulsar el agua en dirección a las enfurecidas masas entra en funcionamiento una bomba centrífuga Rosenbauer N35, capaz de enviar a tres cañones más de 3.500 litros al minuto con una presión de 10 bares. Tres cañones de agua – dos situados sobre la cabina, uno en la zaga – se manejan de forma remota desde la cabina, con unos joysticks.
Todos pueden funcionar a la vez, ya que la bomba se sirve de un motor diésel propio y no resta potencia al propulsor principal. Los dos cañones de cabina expelen unos 1.200 litros por minuto, 900 litros por minuto el trasero. El propulsor principal del Mercedes WaWe 10 es un V6 turbodiésel que cumple la norma Euro5 y tiene 408 CV de potencia. Como apuntes finales, el vehículos también se puede usar en labores de extinción de incendios y otro tipo de emergencias.
Fuente:www.diariomotor.com
Me compraria uno para ir lavando los multanova, para los autovelox de tripode tiene que funcionar muy bien! seguro que la DGT no se encarga de la limpieza... de la cantidad de polvo que se le acumula a esos valiosos aparatos despues de un dia duro de funcionamiento.. 